‘Sarpatta Parambarai’ es esa pequeña joya del boxeo que permanece oculta para el gran público. No es sencillo acercarse a una película india de 171 minutos que sólo se encuentra disponible en versión original. Si además la trama gira en torno a unos hechos socioeconómicos que definieron una época en la India pero que, como cualquier historia nacional de un país, son desconocidos para el resto del globo terráqueo, la cosa se complica. Aunque no es el caso de ‘Sarpatta Parambarai’.
‘Sarpatta Parambarai’ es puro entretenimiento. No importa si hay que escucharla en indio y con la única ayuda de los subtítulos en inglés (porque no se encuentran disponibles en español), tampoco es relevante no terminar de entender muy bien el contexto histórico de revuelta en el que se desarrolla, porque lo importante es la historia de los personajes.
Con una trama que podría recordar a la legendaria ‘Rocky’, ‘Sarpatta Parambarai’ nos sumerge de pleno en una historia pasional donde el amor por el boxeo impregna cada fotograma de la cinta.
La película narra la redención y evolución de un personaje que se entrega en cuerpo y alma a un objetivo: boxear. Y lo hace por y con pasión en un contexto social de crisis política y económica, donde las decisiones de los personajes marcan sus destinos y define quiénes son y quiénes pueden llegar a ser. Estos, además, se muestran imperfectos, incorrectos y, en definitiva, reales. Lejos de los héroes de intachable conducta moral, el protagonista y el resto de integrantes de su clan son la fiel representación del ser humano: seres capaces de lo mejor pero también de lo peor, esclavos del libre albedrio.
Con una narración agridulce, sorprenden los momentos cómicos, mezclados en un ambiente de descarnada realidad social, problemas familiares, violencia y desolación. Sin embargo el mensaje es optimista: No hay camino sin obstáculos.