Así pues, con el susto en el cuerpo, Quentin quiso hablar sobre su siguiente película: una obra con el estilo de ‘Bonnie and Clyde’, ambientada en los años 30, rodada en Australia, y seguramente inspirada en una canción, ya que como el propio cineasta expresó: «Gran parte del lenguaje de la película gira entorno a un sonido o a una canción… Antes de empezar pienso seriamente en la música».

[quote_center]Me retiraré en todo lo alto, dejando a la gente con ganas de más y creando una conexión entre mi primera película y la última que ruede[/quote_center]

The hateful ten

Ha sido la inesperada precísión de Tarantino lo que ha alarmado a los fieles de su cine, pues empeñado en no sobrepasar la decena de películas, Quentin Tarantino ha decidido poner principio y fin a su cine: Para mí, mi legado cinematográfico lo es todo. Quiero poder dejar un ćonjunto de películas que sirvan para definir el cine y que, a ser posible, no excedan de diez, aclaraba para mayor disgusto de sus incondicionales.

¿De verdad se retira Quentin Tarantino?

¿De verdad Quentin tarantino deja el cine?

¿Es posible que el mayor obseso del celuloide renuncie al divertimento cinéfilo de idear y dirigir las más fascinantes e irrepetibles obras maestras del cine? Por suerte, ni el sentido común ni el propio Quentin Tarantino parecen estar de acuerdo en ello: No está escrito en piedra que no pueda superar las diez películas, pero si creo que es el mejor legado. Aunque quién sabe lo que acabaré haciendo en un futuro, manifestaba Quentin Tarantino en clara referencia a su obsesión por dejar la mejor herencia cinematográfica posible.

Y, según parece, lo hara retirándos en todo lo alto, dejando a la gente con ganas de más y en claro tributo a la primera obra que éste dirigió: Reservoir Dogs. Existirá una inequívoca conexión entre mi primera y última película, ha sentenciado el genial director y artista.